Fenadismer califica de “caótica” la actuación del Gobierno italiano en relación a la nueva regulación sobre el cumplimiento del salario mínimo a los conductores profesionales que realicen operaciones de transporte en dicho país.

 Pese a que se estableció su entrada en vigor el 26 de Diciembre, aún faltan por concretar cuestiones relativas al ámbito de aplicación, condiciones salariales y el procedimiento de control.

FENADISMER desea públicamente manifestar su asombro e indignación por la actuación tan “caótica” que está llevando a cabo el Gobierno italiano en relación a la nueva regulación sobre el cumplimiento del salario mínimo en dicho país a los conductores profesionales pertenecientes a empresas transportistas no residenciadas en dicho país, que fue aprobada el pasado mes de julio mediante el Decreto legislativo nº 136 de 17 de Julio de 2016 estableciendo una regulación similar a la aprobada con anterioridad en Francia y Alemania.

 

Así sorprendentemente el grado de desinformación y de incumplimiento reiterado de los plazos establecidos es tal, que más recuerda a una “república bananera” que no a la cuarta potencia que es de la Unión Europea: así respecto del modelo de comunicación de desplazamiento que debe llevarse a bordo del vehículo, si bien la normativa de desarrollo del Decreto Legislativo preveía su publicación en el mes de Agosto, sin embargo tal publicación no se llevó a cabo finalmente hasta el pasado 27 de Octubre, previéndose que su exigencia entrara en vigor este 26 de Diciembre.

 

Sin embargo, a fecha de hoy el Gobierno italiano sigue sin concretar el procedimiento para la aplicación de la nueva regulación sobre el salario mínimo en lo referente a la notificación del desplazamiento al Ministerio de Trabajo italiano, la cuantía del salario mínimo que debe cubrirse, el ámbito de aplicación de la nueva regulación, ni la forma de designación del representante en territorio italiano a efectos de control del cumplimiento de la legislación laboral.

 

Por ello, desde FENADISMER se va a transmitir una queja formal a la Embajada italiana en nuestro país por la actuación tan deplorable que está llevando a cabo por parte del Gobierno italiano en este asunto.